Las naciones integrantes de la Junta Coordinadora del Programa de ONUSIDA reafirmaron su compromiso de superar los obstáculos para poner fin al VIH para 2030. Un elemento crucial entre estos impedimentos es la falta de recursos para financiar el trabajo de este programa de Naciones Unidas, el cual se dedica enteramente a la respuesta a la pandemia de VIH.
La Directora Ejecutiva de ONUSIDA, Winnie Byanyima, habló en la apertura de la reunión, que se llevó a cabo en Ginebra, Suiza. Describió la respuesta al sida como una situación sometida a una gran presión debido a los múltiples desafíos causados por lo que se ha denominado una “policrisis”, según informó el organismo a través de un comunicado.
En este sentido, destacó los desafíos en una amplia gama de temas relacionados con los derechos humanos en todo el mundo, incluyendo los derechos de las mujeres y la igualdad de género, la salud sexual y reproductiva, los derechos de las personas de la diversidad sexual (LGBTIQ) y la libertad de asociación de la sociedad civil.
Byanyima subrayó la importancia de la financiación a largo plazo para abordar estos desafíos y enfatizó que es necesaria la solidaridad global y un compromiso renovado para poner fin al sida. También destacó la estrecha conexión entre la respuesta al sida y otros Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) planteados por la ONU.
Además señaló que, hasta el momento, sólo el 12% de los ODS han avanzado por buen camino y que uno de los pocos ejemplos de progreso es el que tiene que ver con lograr el ODS 3: Garantizar una vida sana y fomentar el bienestar en todas las edades, en concreto, el objetivo secundario 3.3, que incluye poner fin al sida.
Los recursos financieros son vitales para el VIH
En relación a la financiación, se anunció que el Reino Unido e Irlanda comprometieron importantes aportes para ONUSIDA. El Reino Unido aumentará su financiación a 8 millones de libras en 2023, mientras que Irlanda proporcionará 10 millones de euros durante varios años. Estas contribuciones son fundamentales para respaldar los trabajos de ONUSIDA.
La Directora Ejecutiva también mencionó los esfuerzos que está haciendo el organismo para reducir costos, incluyendo una reducción del 10% en los costos totales de personal y la reconfiguración del apoyo que se le da por cada región. Sin embargo, expresó preocupación porque, con las cifras actuales, aún faltan 51 millones de dólares para alcanzar a cubrir el presupuesto básico de ONUSIDA.
La importancia de las poblaciones clave
Durante la reunión se abordó el tema de los grupos de población clave como una prioridad en la respuesta al VIH. En especial, se habló sobre las personas trans y se discutió acerca de las desigualdades que obstaculizan el progreso en la respuesta al sida para estos grupos, así como estrategias para abordar manera más efectiva el riesgo y los efectos del VIH entre ellos.
Erika Castellanos, directora de programas de la organización Global Action for Trans Equity, compartió su historia y experiencia como persona trans y su lucha contra el VIH. Su apasionado discurso recibió un gran aplauso de los miembros de la Junta, quienes reconocieron la importancia de combatir la discriminación y promover la igualdad para poder abordar de mejor manera la pandemia.
Por su parte, el magistrado Edwin Cameron, exjuez de la Corte Constitucional de Sudáfrica y quien ha jugado un papel crucial en la respuesta a la epidemia en su país, también hizo una poderosa intervención llamando a los países a crear un entorno legal que dé voz a los grupos marginados y vulnerables. Subrayó la importancia de utilizar la ley como una herramienta para empoderar en lugar de oprimir, y destacó el papel fundamental de las respuestas lideradas por la comunidad en la lucha contra el VIH.
También durante la reunión, se presentó el Compendio de prácticas prometedoras sobre el papel de las intervenciones de la comunidad religiosa de África para poner fin al VIH en niños, niñas y adolescentes. Este compendio destaca modelos exitosos y mejores prácticas que han sido implementadas por organizaciones confesionales para fortalecer la respuesta al VIH en la niñez y adolescencia.
La reunión de ONUSIDA fue presidida por Alemania, con Kenia como vicepresidenta y Brasil como ponente. El informe de la Directora Ejecutiva de ONUSIDA y las decisiones de la Junta están disponibles (en inglés) en línea.
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