Algunas personas consumen sustancias con el fin de darle un empujón a su sexualidad. Entre las más populares están los poppers, los cuales se usaban, en su origen, como un medicamento para controlar la angina de pecho y otros problemas del corazón.
Sin embargo, su uso se fue diversificando cuando la experiencia mostró que tenían un efecto psicoactivo (parecido a la sensación de borrachera) y que además provocaban la relajación de músculos como los que se encuentran en la vagina y el ano, lo cual facilitaba y podía hacer más placentera la penetración. Pero no todo es como lo cuentan, su uso implica varios riesgos que tienes que conocer.
Explorando el Uso de Poppers
Los poppers son nitritos, sustancias químicas que tienen una función vasodilatadora, es decir, ensanchan los vasos sanguíneos, por lo que su uso se prescribía para controlar la angina de pecho, la insuficiencia cardiaca y otras enfermedades relacionadas.
Se trata de un líquido sin color, con un aroma intenso a solvente, que se evapora muy fácilmente; se utiliza inhalando el gas que emana de ese proceso. Una pequeña cantidad es suficiente para provocar un efecto inmediato en la sexualidad.
Hoy en día, ya no es el tratamiento más común para los problemas del corazón, pero sí se ha popularizado su uso como una droga recreativa. Algunas personas lo utilizan solamente por sus efectos que alteran la conciencia, pero otras lo consumen para obtener esa sensación aumentada en lo sexual.
Influencia de los Poppers en la Experiencia Sexual
Como todas las drogas recreativas, los poppers pueden tener diferentes efectos en distintas personas. Hay quienes experimentan euforia, excitación sexual, desinhibición y mayor sensibilidad en la piel. Como dijimos arriba, también puede favorecer la relajación de la vagina y el ano, facilitando la penetración.
El efecto es inmediato después de la inhalación y permanece por unos pocos minutos, por lo que hay quienes lo inhalan varias veces seguidas para mantener el resultado.
Como efectos indeseados, se puede sentir desde náusea, mareo y dolor de cabeza, hasta problemas más graves, como aumento de la temperatura corporal, problemas para respirar y pérdida temporal o permanente de la vista.
En lo particular AHF no te recomendará nunca el uso de droga alguna, pero sabemos que aún así habrá personas que elijan tomar el riesgo. Para eso queremos que antes conozcas todos los riesgos asociados. Veamos el lado B, los peligros de usarlos.
Cuidados y Precauciones al Usar Sustancias Recreativas
Esta droga acelera los latidos del corazón, pero a la vez disminuye la presión arterial. Esto es especialmente riesgoso para quienes ya tienen alguna enfermedad cardiaca como presión arterial alta (hipertensión) o presión arterial baja (hipotensión).
Además, la inhalación de poppers puede causar daño cerebral a largo plazo. Si bien no se ha comprobado que sea una sustancia adictiva (física o psicológicamente), sí se ha observado que el cuerpo desarrolla cierta tolerancia, por lo que con el paso del tiempo podrías necesitar inhalar más para obtener el mismo efecto.
El uso de esta sustancia está totalmente contraindicado si estás tomando medicamentos para la disfunción eréctil (incluso si los usas de forma recreativa), ya que la combinación de éstos con los nitritos puede ser mortal.
Por otro lado, los poppers pueden ser muy irritantes. Si en su forma líquida llegan a caer sobre tu piel, pueden causar una quemadura química. Por otro lado, la inhalación constante es capaz de irritar la piel de la nariz, la mucosa nasal interna e incluso los pulmones.
Y recuerda: nunca bebas esta sustancia, pues podría llevarte a la muerte.
Otro aspecto importante es que su consumo puede llevarte a tener prácticas sexuales de riesgo como no usar condón, tener sesiones muy largas o intensas de sexo, lo cual te expone más a infecciones de transmisión sexual y microlesiones (fisuras, hemorroides o desgarros).
Consejos para una Sexualidad Responsable cuenta lo siguiente
El uso de estas y otras drogas implica hacer un balance entre el riesgo y el placer:
· Investiga lo más posible y asegúrate de que lo que consumes es realmente popper y no otra cosa.
· Ten a la mano suficientes condones y abundante lubricante, con lo que te protegerás aun si la penetración se vuelve muy intensa.
· No uses poppers si tienes cualquier problema relacionado con el corazón.
· No uses poppers si ingeriste pastillas contra la disfunción eréctil.
· Si notas algún malestar extremo (debilidad, falta de aire, ceguera temporal) busca atención médica cuanto antes.
Y no importa cuáles sean tus prácticas, en AHF América Latina y el Caribe brindamos servicios de prevención del VIH a todas las personas que lo necesiten. Si quieres hacerte una prueba de detección gratuita, localiza nuestras oficinas en tu país y haz una cita ya.
