Se acerca el verano y probablemente estás planeando un viaje para descansar. En la mayoría de los casos, el VIH no debería ser un obstáculo para disfrutar, pero debes tener en cuenta algunas recomendaciones para que esos días sean de verdadera relajación sin contratiempos.
El portal Aidsmap.com ha hecho una compilación de los factores a tomar en cuenta al planear una salida, considerando tu lugar de destino, las posibles condiciones sanitarias e incluso las restricciones de entrada.
Revisa tu destino
En algunos países hay limitaciones de ingreso para las personas que viven con VIH, pero casi siempre se aplican cuando alguien solicita una visa de trabajo o de residencia, no para quien viaja de manera temporal. De cualquier forma, es bueno revisar que no vayas a encontrar obstáculos en un viaje de placer, por lo que puedes consultar las limitaciones de cada país en sitios como hivtravel.org (en inglés).
Además, es importante averiguar si necesitas alguna vacuna u otros medicamentos preventivos, dependiendo del lugar al que viajes. También es importante que tu equipo médico identifique si alguno de los medicamentos que estás tomando pudiera generar interacciones con las vacunas o fármacos necesarios para viajar, como medicamentos contra el paludismo o antibióticos.
Empaca tu tratamiento
Podría ser muy difícil o hasta imposible conseguir tu medicamento una vez que hayas salido de casa, incluso si solo estás haciendo un viaje corto. Por lo tanto, asegúrate de llevar suficiente de todos tus medicamentos contigo para que duren todo tu viaje. También es buena idea llevar algunas dosis adicionales en caso de que haya algún retraso.
Para llevar tu medicación, es más seguro hacerlo en el equipaje de mano, ya que es menos probable que se pierda. O podrías poner algo en el equipaje de mano y algo en tu maleta, en caso de que se pierda alguna de las dos. Si viajas a otro país, será muy útil tener una copia de tu prescripción o una carta de tu equipo médico explicando que tus medicamentos son para una condición médica crónica.
¿Vacaciones del tratamiento?
No lo consideres. Las pausas en el tratamiento no se recomiendan. Los riesgos de suspender tus medicamentos incluyen desarrollar resistencia a los mismos, además de ser más vulnerable a problemas de salud en el futuro y, si tienes un recuento bajo de células CD4, puedes enfermarte mientras no estás tomando tratamiento.
Recuerda que tomar tu medicación al pie de la letra es fundamental para mantener un buen estado de salud y evitar contratiempos en ese aspecto.
Programa tus dosis
Si vas a viajar a través de zonas horarias diferentes, esto tendrá implicaciones para la hora en que tomas tu medicamento. Por lo general, es mejor adaptarse a la zona horaria de tu destino lo más rápido posible: si cuando estás en casa sueles tomar medicamentos con el desayuno, lo mejor es tomarlos con el desayuno durante tu viaje. Si mantienes las mismas rutinas en la toma de pastillas probablemente será más fácil mantener tu adherencia.
Si estás estable con el tratamiento y tienes una carga viral indetectable, tomar una dosis de tus medicamentos unas horas antes o después debido a un cambio de zona horaria generalmente no causará problemas. Si tienes dudas sobre esto, puedes pedir ayuda a tu equipo médico.
Recuerda que el VIH no debe ser un problema mientras prestes la atención suficiente a los detalles: prevención, tratamiento y apego. Si en tu sitio de destino encuentras una oficina de AHF América Latina y el Caribe, siempre puedes acercarte para conocer nuestros servicios de VIH, que son gratuitos, confiables y libres de discriminación. Localiza nuestros centros, estamos en 12 países de la región.