Las personas que no tienen una vivienda, que consumen drogas o que experimentan problemas de salud mental están en situaciones especialmente vulnerables frente al VIH. Por lo general, son poblaciones que sufren de un gran estigma social, el cual se repite en las instituciones y servicios de salud, lo que impide que reciban la atención adecuada.
Estos tres grupos se encuentran entre las poblaciones clave que requiere especial atención en las estrategias de control del VIH. En busca de acciones que mejoren los resultados, los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos llevaron a cabo un estudio acerca de la efectividad de los nuevos medicamentos antirretrovirales de acción prolongada en estas poblaciones.
Medicamentos de acción prolongada
La investigación fue presentada en el marco de la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas, la más importante en temas médicos relacionados con el VIH.
De acuerdo con un comunicado de prensa de los NIH, el objetivo del estudio fue alcanzar a las personas que históricamente han tenido menor acceso al tratamiento antirretroviral, entre ellas, quienes consumen drogas, quienes tienen problemas mentales o quienes carecen de una vivienda estable.
Los antirretrovirales de acción prolongada, que son inyectables, se administran una vez cada cuatro u ocho semanas, de manera que pueden ayudar a estas poblaciones a superar los obstáculos que encuentran cotidianamente para acceder al tratamiento.
Sin embargo, el único tratamiento de este tipo que ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) sólo está autorizado para administrarse a personas que están tomando antirretrovirales por vía oral y que gracias a ello alcanzaron la supresión del virus, es decir, que disminuyeron tanto la cantidad de VIH en su sangre que ahora está en niveles indetectables.
Lo anterior significa que, en las condiciones actuales, personas que tiene problemas para seguir correctamente su tratamiento, como sucede con frecuencia entre las poblaciones mencionadas, no son elegibles para este tratamiento.
Buena opción de control
La investigación incluyó a 133 personas con VIH de la ciudad de San Francisco, California, sin importar si estaban en tratamiento antirretroviral o si tenían supresión del virus. En junio de 2021 comenzaron a recibir el tratamiento de acción prolongada. En ese punto inicial, el 43% de los participantes tenían una infección por VIH no tratada o el virus no estaba suprimido.
Cada dos semanas se revisó el estado de salud de cada participante y se realizaron actividades periódicas de divulgación para recordar a las personas la fecha de su cita para recibir una nueva inyección.
De quienes iniciaron el estudio sin tener suprimido el virus, 96.5% alcanzó la supresión viral en un promedio de 33 días. Únicamente dos participantes del estudio no alcanzaron o no mantuvieron la supresión viral, es decir, 1.5%, mismo porcentaje que ya se había observado en estudios hechos en personas que tomaban antirretrovirales orales.
El promedio de edad de los participantes (88% de los cuales eran hombres) fue de 45 años. El 58% de ellos dijeron no tener una vivienda estable, el 8% afirmaron haber estado sin hogar, el 38% declararon tener un problema mental y el 33% dijeron consumir drogas.
Ampliar los beneficios
Varios estudios han demostrado que iniciar el tratamiento antirretroviral cuanto antes y no interrumpirlo tiene grandes beneficios para la persona con VIH y brinda un efecto positivo adicional en la comunidad, ya que evita la transmisión del virus por la vía sexual.
Sin embargo, las barreras sociales, como el estigma, siguen obstaculizando que los tratamientos lleguen a todas aquellas personas que los necesitan, especialmente las que forman parte de las poblaciones más vulnerables. Investigaciones como esta aportan información sobre la gran efectividad que tendría un tratamiento antirretroviral de acción prolongada en grupos que aún no han sido estudiados.
El tratamiento contra el VIH es la vía por la cual las personas con la infección logran una vida extensa y con buena calidad. Si tú ya tienes un diagnóstico, pero no has iniciado tu tratamiento, o si lo suspendiste y quieres retomarlo, acércate a AHF América Latina y el Caribe y te ayudaremos a obtenerlo. Localiza nuestras oficinas en tu país o escríbenos por Whatsapp.