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Nutrición y VIH: Estrategias Claves para una Alimentación Saludable y Segura

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Sheila

Es bien sabido que los alimentos adecuados ayudan a mejorar la salud y el bienestar de las personas, pero también es cierto que no siempre hacemos las mejores elecciones sobre lo que ponemos en nuestros platos. Esto aplica también en personas que viven con VIH.

Para las personas que viven con VIH, es muy importante comprender la importancia de la alimentación entre todas las acciones de cuidado, ya que una correcta nutrición puede contribuir a mejorar la calidad de vida y también, y esto es igual de importante, a evitar complicaciones de salud.

Seguridad alimentaria

De acuerdo con la información de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos, el concepto de seguridad alimentaria se refiere a la manera de escoger, manejar, preparar y guardar los alimentos para prevenir enfermedades que puedan transmitirse a través de ellos.

Tanto los alimentos como el agua pueden estar contaminados con microorganismos que causan enfermedades, y al seguir los lineamientos de la seguridad alimentaria se reduce el riesgo de contraer estas enfermedades.

Esto es importante para las personas con VIH y otras más que tengan el sistema inmunitario afectado, ya que podría ser más fácil que se enfermen o que dicha enfermedad se torne más grave.

Para evitar complicaciones, es recomendable seguir los cuatro pasos de la seguridad alimentaria, que son:

  1. Lavar. Hay que asegurarse de la limpieza de las manos, los utensilios de cocina y las superficies de preparación de los alimentos.
  1. Separar. Es importante separar los alimentos para evitar que los microorganismos de un alimento pasen a otro. Por ejemplo, se debe separar la carne, el pollo, los mariscos y los huevos crudos de los alimentos listos para comer, como las frutas, las verduras y los panes.
  1. Cocinar. Los alimentos deben cocinarse totalmente a temperaturas altas que acaben con los microorganismos.
  1. Refrigerar. Se recomienda refrigerar o congelar carne, pollo y mariscos u otros alimentos que puedan dañarse en un plazo de 2 horas después de haberlos comprado o cocinado.

Consejos de Nutrición para Personas con VIH: Una Dieta Saludable para una Vida Mejor

Los esquemas de alimentación para personas con VIH no son tan diferentes de quienes no tienen el virus, y esencialmente deben considerar:

  • Consumir alimentos variados de los cinco grupos: frutas, verduras, granos, proteínas y productos lácteos.
  • Consumir una cantidad adecuada de alimentos para mantener un peso saludable.
  • Elegir alimentos con bajo contenido de grasas saturadas, sal (sodio) y azúcares añadidos.

Y más allá de lo que ya sabemos que sí debes comer, hay que poner atención en lo que deberías evitar para así no estar en riesgo de contraer una enfermedad transmitida por los alimentos, como lo señala la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos.

Una lista abreviada lo que no hay que comer sería esta:

  • Carne o pollo crudos o poco cocidos.
  • Pescado crudo, mariscos parcialmente cocidos o mariscos ahumados refrigerados.
  • Mariscos crudos y sus jugos.
  • Leche o bebidas frutales sin pasteurizar.
  • Productos fabricados con leche sin pasteurizar, como quesos o yogures.
  • Huevos crudos o poco cocidos.
  • Alimentos que contengan huevos crudos o poco cocidos, como algunos aderezos para ensaladas, masa para galletas o masa para pasteles.
  • Verduras crudas y sin lavar, como la lechuga.
  • Embutidos que no se han cocinado.
  • Patés sin pasteurizar.
  • Brotes crudos, como los de alfalfa, frijoles, etcétera.

Además, la FDA señala que los síntomas pueden alertar sobre una enfermedad transmitida por alimentos. Dichos síntomas suelen presentarse entre 12 y 72 horas después de haber comido el alimento contaminado, y pueden incluir náuseas, vómitos, diarrea (que puede contener sangre) y dolor en el abdomen.

También podrías sentir síntomas parecidos a los de la gripe, como malestar general, fiebre y dolor de cabeza. En caso de que esto ocurra, es mejor ponerte en contacto con tu médico para recibir el tratamiento adecuado.

Recuerda que toda persona con VIH debe recibir tratamiento antirretroviral y una atención integral para todas las áreas de su salud. Si recibiste un diagnóstico pero no has iniciado tu tratamiento o los suspendiste y quieres retomarlo, acércate a AHF América Latina y el Caribe y te ayudaremos. Tenemos oficinas en 11 países, localiza la más cercana a ti.