Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

¿PrEP inyectable trimestral para mujeres?

Picture of Sheila
Sheila

La profilaxis pre exposición al VIH, mejor conocida como PrEP, es el tratamiento capaz de prevenir la infección por este virus, y es una estrategia cada vez más aceptada para disminuir la transmisión en personas vulnerables. Sin embargo, una población que es muy vulnerable, pero no ha tenido buenos resultados en las investigaciones sobre PrEP es la de las mujeres cisgénero. Eso podría cambiar con el tratamiento inyectable, según una reciente investigación.

Se trata de un análisis derivado del estudio HPTN 084, mismo que está diseñado para evaluar la eficacia y seguridad de la PrEP inyectable en mujeres heterosexuales y que durará al menos cuatro años.

Las mujeres, una población especial

Tal como lo reporta el sitio web Aidsmap.com, especializado en información sobre el VIH, cuando se trata de este virus personas heterosexuales, las mujeres suelen estar en desventaja en comparación con los hombres. A nivel mundial, tienen más probabilidades de tener VIH y de adquirirlo a una edad más temprana; biológica y socialmente son más vulnerables; y los estudios de prevención con medicamentos con frecuencia han arrojado peores resultados para ellas.

Sin embargo, el estudio en cuestión, que fue presentado en febrero durante la 30ª Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas (CROI, por sus siglas en inglés), se encontró una notable eficacia en las inyecciones del fármaco cabotegravir utilizado como PrEP en mujeres cisgénero.

Asimismo, se encontró que los niveles de medicamento persisten el tiempo suficiente en las mujeres como para que una inyección cada tres meses, en lugar de cada dos meses, como en el estudio HPTN 084, pueda ser efectiva.

Además de ser más conveniente, la dosificación trimestral significaría que las inyecciones de PrEP podrían administrarse según el mismo calendario que los anticonceptivos inyectables. Esto haría más sencilla la dinámica de constancia y seguimiento de las mujeres.

Indagaron en la dirección correcta PrEP

El doctor Mark Marzinke, de la Universidad Johns Hopkins (Estados Unidos), y su colega, la doctora Jessica Fogel, realizaron un análisis de los niveles de medicamento en mujeres que participaron en el estudio HPTN 084 y que se retrasaron en la fecha de sus inyecciones, lo que resultó en brechas más largas entre ellas de lo programado.

Dado que las dos primeras inyecciones se administran con un mes de diferencia en lugar de dos meses (para alcanzar un “estado estable” de los niveles de medicamento), una segunda inyección significativamente retrasada fue definida como aquella que se administró de cuatro a seis semanas tarde, es decir, ocho a diez semanas después de la primera.

Después de este periodo inicial, las inyecciones se programan cada ocho semanas. Los autores las agruparon en inyecciones que se administraron de cuatro a seis semanas tarde (es decir, 12-14 semanas después de la última inyección), seis a ocho semanas tarde y ocho a diez semanas tarde (16-18 semanas o más después de la última inyección, indicando una inyección completamente omitida).

En total hubo 224 casos de inyecciones retrasadas en 194 mujeres (algunas tuvieron más de una inyección retrasada) de entre las más de 1,600 mujeres que recibieron cabotegravir en el estudio.

En las mujeres cuya segunda inyección se retrasó, en el 91% de ellas el nivel de medicamento se mantuvo en más de ocho veces la concentración inhibitoria del 90% (es decir, la concentración suficiente de medicamento para reducir en un 90% la replicación del VIH, conocida como IC90). En el 100% de las mujeres el nivel se mantuvo en más de cuatro veces la IC90.

Protección prolongada en PrEP

En las mujeres cuyas inyecciones se retrasaron, el 98% tenía niveles por encima de cuatro veces la IC90 si la inyección se retrasaba de cuatro a seis semanas, el 95% si se retrasaba de seis a ocho semanas y el 90% si se retrasaba de ocho a diez semanas. La proporción con más de ocho veces la IC90 fue del 87%, 84% y 62%, respectivamente.

Esto indicaría que la gran mayoría de las mujeres aún tendrían niveles protectores de medicamento después de un retraso de hasta seis semanas, esto es, hasta 14 semanas después de su última inyección, lo que indica que una dosis cada 12 semanas debería ser suficiente para mantener la eficacia del tratamiento.

Hasta ahora, sólo una mujer del estudio HPTN 084 que recibió cabotegravir adquirió el VIH a pesar de recibir el tratamiento. Este caso es importante porque esta mujer mantuvo siempre niveles superiores a la IC90, incluso en la cita de seguimiento en la que dio positivo en la prueba de VIH. Sin duda, este será un dato que tomar en cuenta para el equipo de investigación.

Prevención en todas las formas

La PrEP es una opción de tratamiento preventivo para quien no puede negociar el uso del condón, tal como muchas mujeres que viven en situación de violencia, o bien, para quienes por cualquier otra razón no usan el preservativo en su vida sexual.

Mientras las investigaciones sobre estos fármacos continúan, si tienes la oportunidad, incorpora el condón a tu actividad sexual y protégete no solo del VIH, sino también de otras infecciones de transmisión sexual que pueden afectar tu salud. En AHF América Latina y el Caribe tenemos condones gratis para ti, pruebas de VIH sin costo y vinculación a tratamiento si vives con VIH. Localiza nuestras oficinas en tu país y haz una cita ya.