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Organizaciones civiles urgen a México a adquirir vacunas contra la viruela símica

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Tina Gutiérrez

Contrario a las estrategias que muchos países de América Latina están adoptando frente al brote de viruela símica, también conocida como monkeypox, México no ha realizado acciones contundentes frente a esta nueva epidemia, que a la primera mitad de noviembre alcanzaba los 3 mil 141 casos confirmados, 5 mil 243 sospechosos y cuatro defunciones oficialmente reconocidas.

Ante la urgencia de una política pública que no sólo atienda adecuadamente los casos –cosa que tampoco está sucediendo–, sino que prevenga nuevos contagios mediante la vacunación de los grupos más vulnerables, un conjunto de organizaciones y personas aliadas han conformado el colectivo Viruela Símica Mx, para exigir que el Estado tome cartas en este asunto, que desde mayo de este año fue declarado una emergencia sanitaria internacional.

Para plantear sus demandas, el colectivo abrió una petición en la plataforma digital Change.org, donde plantean una serie de acciones que deberían estar efectuándose para contener el brote epidémico en el país.

Retraso en las acciones contra viruela símica

“En México hay una carencia de acciones contundentes y decisivas, a diferencia de otros países donde las estadísticas de viruela símica ya van a la baja”, señaló en entrevista José Antonio Matus, coordinador de abogacía de AHF México, una de las organizaciones que forman parte de Viruela Símica Mx.

“No vemos avance, por ejemplo, en la adquisición de la vacuna, cuando la mayoría de los países en Latinoamérica ya están comenzando a vacunar”, enfatizó, ya que muchos de ellos se abastecieron a través del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) “y anunciaron que ya habían adquirido las vacunas, o bien, que ya estaban iniciando a vacunar a sus poblaciones”. Entre estos países se encuentran El Salvador, Panamá, Brasil, Colombia y Perú.

Por otro lado, la detección está totalmente centralizada, pues todas las muestras se envían a analizar a la capital del país, al Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (INDRE), aun cuando ya hace tiempo la Secretaría de Salud había anunciado la posibilidad de que el diagnóstico se efectuara en más entidades.

En cuanto a la atención de los casos, las instituciones no tienen protocolos establecidos, con excepción de la Clínica Especializada Condesa, que usualmente se encarga de atender a las personas con VIH de la Ciudad de México que no tienen seguridad social. Pero una respuesta adecuada no se ha visto en otras instituciones, afirma Matus.

La ausencia de vacunación para viruela símica es injustificada

Sumado a lo anterior, la falta de vacunas preocupa en especial a las y los activistas del colectivo mexicano, ya que a seis meses de que se declarara la viruela símica como emergencia sanitaria, el gobierno de México no ha adquirido ninguna dosis del biológico ni ha autorizado su ingreso a la país, en caso de que algún particular pretendiera adquirirlo.

El Consejo Nacional de Vacunación ha pasado todo este tiempo “analizando la pertinencia de la adquisición de la vacuna”, explica José Antonio Matus, “sin embargo, es una vacuna que está probada ya en diversos países, los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) y la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) de Estados Unidos la están utilizando, así como varios países de Europa; la misma OPS ha promovido que los países la adquieran”.

Por esto, comentó el entrevistado, las organizaciones “no sabemos qué están analizando, ¿qué evidencia están esperando? En este sentido, hemos preguntado si los mexicanos somos diferentes del resto de la población mundial para que los análisis tengan que ser tan rigurosos”.

Hasta el momento, México ni siquiera ha emitido una declaración de emergencia sanitaria, cuando este fue el primer paso que otros países dieron cuando comenzó el brote. “Nos parece una negligencia, ya que esa declaratoria de emergencia debe contener las medidas para hacer frente a la epidemia, y en la pandemia de COVID-19 se emitió desde los primeros días”, aclaró el activista, y agregó que “consideramos que la negativa de las autoridades a emitirla es porque tendría que incluirse la adquisición de la vacuna”.

Contradicciones de las autoridades

Irónicamente, junto a esta falta de acciones gubernamentales, el 10 de noviembre pasado un grupo de funcionarios mexicanos publicó en la prestigiosa revista médica The Lancet un artículo que recomienda la vacunación contra viruela símica a los grupos de población que se encuentran en mayor riesgo de infección.

La pieza está firmada, entre otros autores y autoras, por el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell; el titular de la Comisión Coordinadora de los Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad, Gustavo Reyes-Terán, y la directora del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/sida (Censida), Alethse de la Torre.

“Esto nos preocupa mucho”, sostiene Matus, “porque ante las revistas científicas se pretende mostrar un lado apegado a la evidencia científica y esto dista mucho de las políticas públicas que se emprenden en nuestro país”. Entonces, pareciera que existe una confrontación entre la evidencia científica y la política pública. “Parece que están peleados pero son las mismas personas las que escriben un artículo y quienes deberían tomar las decisiones”.

Homofobia institucionalizada o negligencia

Para el integrante de AHF México, hay pocas razones para que el gobierno no haya dado pasos más contundentes para frenar la expansión de la viruela símica. Una de ellas podría ser la “homofobia institucionalizada”, puesto que es bien sabido que los grupos más afectados por esta epidemia están siendo los hombres que tienen sexo con hombres, como los hombres gays y bisexuales.

Aunque cualquier persona puede contagiarse del virus, esta información no ha sido suficientemente difundida por las autoridades de salud, lo cual incrementa el estigma y la discriminación hacia las poblaciones ya de por sí vulnerables.

“Eso obstaculiza la detección porque las personas creen que van a ser relacionadas con estos grupos que tradicionalmente han sido estigmatizados, o si de verdad pertenecen a estos grupos, creen que al acudir a las instituciones van a ser discriminadas”.

Para subsanar todos los temas antes mencionados, así como otros que se requiere cubrir para brindar una respuesta adecuada a la viruela símica, las organizaciones civiles publicaron su petición en Change.org e invitan a todas las personas a conocerla y firmarla, de modo que las exigencias queden respaldadas por la mayor cantidad posible de voces.